Gracias al uso de un Enterprise Service Bus, las compañías pueden aumentar su flexibilidad y reutilizar activos de TI, con una arquitectura basada en una arquitectura orientada a servicios (SOA).
Una arquitectura orientada a servicios (SOA) ofrece un medio para definir servicios, que representan tareas empresariales que se repiten, como "comprobar las cuentas de clientes", utilizando interfaces bien definidas y basadas en estándares.
Un Enterprise Service Bus (ESB) proporciona una infraestructura de conectividad que puede utilizarse para integrar servicios en una arquitectura SOA.
Conjuntamente, SOA y el ESB ayudan a reducir el número y la complejidad de las interfaces, lo que permite centrarse en los problemas de la empresa en lugar de preocuparse por la complejidad de la infraestructura de TI.