Las transiciones proporcionan los enlaces entre actividades. Son la construcción de flujo principal y dictan el orden en el que se ejecutarán las actividades. Las transiciones son unidireccionales y una actividad puede tener varias transiciones de salida y de entrada que forman puntos de rama y de sincronización respectivamente. Puesto que cada definición de proceso debe tener una actividad de inicio y una de final (consulte Actividad base), una definición de proceso puede considerarse informalmente como un grafo dirigido en el que las actividades son los vértices, las transiciones son los arcos y todas las rutas que comienzan en la actividad de inicio conducen a la actividad final.