Información escolar

Los niños implicados con la agencia de bienestar infantil pueden tener problemas escolares, necesidades educativas especiales o problemas de asistencia. Su educación puede verse interrumpida o fragmentada debido a cambios de vivienda o a circunstancias familiares. Mejorar la participación escolar y el rendimiento en la escuela son objetivos importantes para las agencias y se suelen utilizar como medida del desarrollo de la competencia del menor. Los niños que cambian de escuela debido a su emplazamiento en nuevos hogares de acogida son especialmente vulnerables. Cambiar de escuela puede ser duro para los niños que requieren estabilidad, tanto si cambian de ciudad como si cambian de país. Cualquier cambio puede afectar su rendimiento además de su desarrollo social y personal.

Una parte integral del seguimiento escolar de un menor es medir su rendimiento. Se pueden medir varios modos de progreso, (esto es, la media de notas, los exámenes escolares nacionales, los informes escolares, etc.). La intención es supervisar el progreso del menor en la escuela y también identificar cualquier impacto potencial que pueda suponerle el estar bajo custodia. El rendimiento también se puede mantener para temas específicos, tales como resaltar las asignaturas en las que el menor sobresale y las que puede estar suspendiendo. Se pueden realizar recomendaciones basadas en el rendimiento escolar, incluidas recomendaciones para cubrir las necesidades especiales de un menor. La documentación asociada con el registro escolar de un menor se puede almacenar como archivos adjuntos. Los adjuntos pueden ser documentos escaneados o versiones electrónicas de estos documentos adjuntos a la información personal del menor. Los ejemplos de documentación incluyen los informes escolares, los planes de estudios, los resultados de exámenes y pruebas de las escuelas, la formación vocacional y el empleo.