Las agencias de bienestar infantil colaboran con otras agencias, tales como los juzgados para evaluar e investigar los informes de maltrato y/o negligencia hacia menores. La agencia de bienestar infantil ofrece servicios para proteger al menor durante el proceso de investigación. Los investigadores de bienestar infantil deben realizar entrevistas cara a cara con las presuntas víctimas de maltrato y negligencia infantil. También deben obtener información de otras fuentes. La agencia debe actuar con rapidez en las situaciones de alta prioridad y debe tener investigadores que se desplacen a las diferentes ubicaciones para cumplir con los requisitos de contactos. Los investigadores deben confirmar la identidad de las personas y capturar la información narrada de forma precisa y rápida. El personal de la agencia evalúa la seguridad del menor, desarrolla un plan de seguridad cuando resulta adecuado y evalúa un riesgo futuro de daños para la familia. En función de sus interacciones y de la política local, los investigadores identifican los servicios para el menor y la familia. El investigador también debe disponer de las alegaciones y, a veces, debe retirar al niño de su hogar familiar si se encuentra en una situación no segura.