Considere los convenios de denominación que utiliza para las bases de datos que crea para que las utilice una aplicación.
Asegúrese de que las bases de datos utilizadas para los datos de aplicaciones, a los que se accede a través de los flujos de mensajes desplegados, tengan nombres exclusivos en la red, de modo que no haya posibilidad de confusión o de errores para los usuarios.